sábado, 25 de abril de 2015

El gato dormilon- La gatita Susi.

A el gato dormilón, llamado Tomas no le gustaba mucho moverse de su casa, solo era feliz acostado todo el día en su camita.

Pero paso que un día vino a su barrio una gatita muy bonita, y el gato Tomas al verla, se enamoro locamente de ella.

Su pelo era todo blanco y se veía tan suave y hermosa que todos los gatos de aquel lugar se volvieron locos por ella.
 La gatita se llamaba Susi y desprendía un olor que volvía locos hasta los perros, si, si, no exagero era muy linda.

Bueno pues paso que el gato Tomas, se lavo mas de lo de costumbre y se puso muy guapo, su trabajo le costo pero quedo muy bien, tan guapo quedo que su ama al verlo se quedo muy sorprendida, le costaba hasta reconocerlo ya que siempre estaba tumbado sin hacer nada.

El gato Tomas salio a la calle a buscar a la linda gatita, pero solo pudo verla a través de la ventana de la casa en la que vivía aquella gatita,- tan linda- que había robado el corazón de Tomas.

Así que espero a la noche, a que todos estuviesen durmiendo y fue a buscarla, se colo por la tapia de la parte de detrás de la casa y la vio, allí estaba ella sentada en el patio de su casa peinándose y poniéndose guapa.

Al gato Tomas por poco le da algo al verla- se había enamorado muchísimo de ella.

Pero los demás gatos del barrio también la buscaban así que tuvo que ingeniar un plan.

Finguio caerse de lo alto de la tapia y estar herido- ella al verlo salio corriendo en su ayuda. ¿ Que te ha pasado gatito?- dijo ella muy preocupada, -no se me he resbalado- y me duele mucho un pata, - pues ven conmigo y descansa un rato a mi lado, -vale - dijo el gato Tomas.

Mientras los otros gatos, miraban desde lo alto de los tejados un poco enfadados con el gato Tomas.

Pero así fue el gato Tomas se había salido con la suya y estuvo varios días con la gatita Susi, se hicieron novios después de muchos días y los gatos del barrio tuvieron que aguantarse porque el gato Tomas había sabido conquistar a aquella hermosa gatita.

 Y  Tomas y Susi fueron felices y se quisieron mucho. A y tuvieron muchos gatitos.